Drogas y el afán prohibidor

Un ensayo sobre las drogas, las prohibiciones y los delirios colectivos

Una idea de Jordi Cebrián

Argumentos contra la legalización: El factor humano

Yo conocía un chico que era una bellísima persona. Pero por culpa de los traficantes cayó en el infierno de la droga y acabó muerto de sobredosis. La droga mata y los traficantes son asesinos. Si lo legalizamos, ¿porque no legalizar también el asesinato, la violación o el robo? Según estas absurdas teorías, si dejaran de ser un delito dejarían de ser un problema.

Cada día leemos o nos enteramos de tragedias relacionadas con el mundo de las drogas. Y esto pasa en una mundo donde las drogas ya están prohibidas y donde a la gente se la mete en la cárcel por vender o consumir. La cuestión radica en entender que es la actual situación la que permite estos sucesos. Por otra parte, la diferencia esencial entre el uso de drogas y delitos como el robo, la violación y el asesinato es que mientras estos últimos afectan de manera directa a terceras personas, esto no es así en el caso del consumo de drogas.

Buscar la explicación de patrones de conducta autodestructivos en sustancias y no en la mente humana, es un error peligroso. Existirá gente que abuse de drogas estén éstas prohibidas o no, como hay gente que abusa del bingo, del automóvil o de los alimentos. Pero este abuso será particularmente peligroso si, además, sumerge a la persona en ambientes delictivos, la hace enfrentarse a sustancias de composición incierta o le genera el desprecio marginador de la sociedad.

Además, pensemos en qué solución ofrecen la mayoría de países para quienes usan o abusan de las drogas: encarcelarlos. Con esto tan sólo se añade más sufrimiento al sufrimiento y se potencia la transformación de personas con problemas personales o sociales en delincuentes.